NUESTRA HISTORIA
PROPÓSITOS
El Consejo Evangélico de Canarias (CEC) está realizando una labor de representación que se traduce en servicio al trabajo de las iglesias evangélicas del archipiélago canario, en su conjunto y de manera individual, desde aspectos puramente espirituales hasta el desarrollo y promoción de la cultura, la identidad pública y la obra social protestante.
Para esta labor, todos somos necesarios y nuestro anhelo es aglutinar a la mayoría de las iglesias en un verdadero espíritu de fraternidad buscando una visión común bajo la dirección de nuestro Señor Jesucristo.
FINES DEL CONSEJO
Honrar a Dios y predicar su Palabra utilizando todos los medios de comunicación al alcance del Consejo.
Promover la comunión cristiana, y la unión fraternal de las Iglesias e instituciones de confesión Evangélica.
Fomentar la comunicación y la colaboración entre sus miembros, estableciendo los canales informativos precisos y elaborando planes de actuación conjunta en temas que contribuyan al desarrollo de los fines religiosos de las entidades miembros.
Representar a sus miembros ante las autoridades autonómicas, provinciales, insulares y locales, así como ante otros organismos, instituciones y medios de comunicación según se requiera, sin perjuicio de la plena capacidad de que dispone, a estos efectos, cada uno de los miembros en particular.
El ejercicio de la caridad cristiana.
Velar por el efectivo desarrollo de los derechos de libertad religiosa, promoviendo la defensa de los mismos ante las instancias y con los medios que en cada momento fueren oportunos.
HISTORIA
La estructuración del Estado en Comunidades Autónomas, hace aconsejable la creación de un organismo evangélico dependiente de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (FEREDE) que en armonía con la misma y de acuerdo con las normas que regulan la Cooperación del Estado con la FEREDE (Ley 24/1992 y disposiciones complementarias) facilite el desarrollo de los Acuerdos de Cooperación a nivel Autonómico y sirva de instrumento aglutinador, de los recursos y esfuerzos de las Iglesias e instituciones evangélicas en aras de un ministerio más eficaz a la sociedad y de una mejor defensa de sus derechos dentro del marco de la Comunidad Autónoma de Canarias.
Por las razones expuestas, la Comisión Plenaria de FEREDE en fecha 27 de junio de 1996 aprobó una modificación de sus Estatutos por la que se autoriza la integración en la citada federación de Consejos Evangélicos Autonómicos, constituidos como órganos dependientes de la misma para actuar dentro del marco de los Acuerdos de Cooperación, en asuntos de interés autonómico que no sean competencia de otros órganos de FEREDE.
Esta Federación se denomina Consejo Evangélico de Canarias, es de confesión evangélica o protestante, se constituye al amparo de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa del 5 de julio de 1980, se regirá por los presentes Estatutos y actuará dentro de ese marco ejercitando los derechos reconocidos en la Constitución y las Leyes.